Más de 200 relatos de testigos presenciales sobre hechos ocurridos en 26 siglos

martes, 30 de octubre de 2007

Agag LVII preso en la isla de Elba

Por el Journal des Debats

"Agag XXVI, quien reinara entre 1659 y 1695, fue conducido preso por orden de Hediondo, el hijo de Don Jediondo a la isla de Elba, el 18 de enero de 1675". Le Journal des Debats, año 1675, traduce Diego Guauque, intérprete de RCN.

El rey Agag LVII, administrador en ese entonces de la colonia de Montebello, fue conducido a prisión el 18 de enero de 1675, y además fue enviado por destierro a la isla solitaria de Elba, que queda en Europa Occidental. Allá fue conducido por orden de la maligna Dinastía Hediondo, regida en ese entonces por el criminal más famoso de la tierra de Paraguas, Don Jediondo, y por su hijo Hediondo, nacido en noviembre de 1648. Los Hediondo por su gusto, mandaron preso al rey Agag XXVI hacia la isla de Elba, sin ningún acompañante y solitario, para quedarse hasta que se muera. Según declaraciones del caudillo Ezión Geber, Don Jediondo está secuestrando a Agag LVII y confinándolo en Elba con el fin de tomarse a Montebello y Hoechst. Mas no lo lograron. Un buque comandado por el anciano Abrona y su hijo Ezión Geber fue hacia la isla de Elba, donde estaba preso Agag LVII, y fueron y se lo llevaron libre. Con gran disgusto de Hediondo.

Don Jediondo saquea los templos de la Capital

crónica de un testigo presencial

"Don Jediondo, tiránicamente, saquea a Ciudad Futura y sus alrededores, conquistando las fortalezas e invadiendo los territorios del nordeste de Paraguas, dejando 34 muertos y 120 heridos. Tildan a Don Jediondo de malhechor y de adorador de Farrol en ese tiempo. ¿Cómo Abrona y sus soldados se las arreglarán para acabar con este bandido?". Este fragmento es tomado del libro: "La dinastía Hediondo: los males que esta gente ha hecho para hacer que la gente sufra". Relatado por un testigo presencial.

Al ver Don Jediondo que su descendencia estaba firme, decidió apoderarse del territorio llamado Meningococo para ser rey de Meningococo y Hoechst. Así pues, en mayo de 1650, Don Jediondo invadió Meningococo con un poderoso ejército, con carros, elefantes y una gran flota, y atacó al principal Lopera, el cual retrocedió ante él y huyó dejando muchos muertos en el campo. Don Jediondo ocupó las ciudades fortificadas de Hoechst y Ciudad Futura y los saqueó.

Después de esta victoria sobre Meningococo, el 13 de abril de 1652, Don Jediondo se puso en marcha con un poderoso ejército contra Cauchosol, y llegó a Ciudad Futura. Entró con arrogancia en los santuarios y se apoderó del altar de oro, del candelabro con todos sus accesorios, de la mesa para las comidad, de las copas, las tazas, los cucharones de oro, el velo y las coronas, y arrancó todo el enchapado que adornaba la fachada del templo. Se apoderó también de la plata, el oro, los utensilios preciosos y los tesoros escondidos, los cuales logró encontrar. Con todas esas cosas se fue a su país. También mató a mucha gente y habló con grandísima insolencia.

Al cabo de algunos días, la gente se reunía en un plan para acabar con Don Jediondo, que está en su país disfrutando de los robos que le ha hecho al valle de Hoechst, hasta se pensó en cómo ejecutarlo. Y se realizó, un 8 de junio de 1652, un toque de queda para quienes estén a favor de Don Jediondo y los adoradores de Farrol, gente que sí tiene que ver con la Dinastía Hediondo.

Muerte de Hor de Gidgad

Por Agag XV

"Hor de Gidgad se fue hacia Cin para vengarse de una ofensa que le hicieron los habitantes de Caucango. Pero, en el transcurso del viaje, el falso dios Farrol lo dejó morir. No sólo se accidentó: también enfermó durante el viaje. Pero, además de agonizar, su cuerpo despedía un olor totalmente desagradable, que ni la gente de Cin quería ni respirar. Poco después murió a la edad de 78 años. Un siglo después, la hediondez se revirtió en el lugar que llamaban Céfiro". El rey Agag XV relata cómo muere Hor de Gidgad el 15 de octubre de 1634. Tomado del libro: "El porqué de las Guerreras Mágicas", del crítico Octavio Mesa García.

Por aquel tiempo, Hor de Gidgad tuvo que retirarse de Paraguas en desorden. Había entrado en la ciudad llamada Caucango, e intentó robar los objetos de culto y apoderarse de la ciudad. Pero la gente se había levantado en armas, y Hor de Gidgad, derrotado por los habitantes, tuvo que emprender una retirada humillante. Cuando estaba en Ciudad Azafrán, se enteró de lo que le había sucedido a Jotbata y a los soldados de Abrona. Fuera de sí por la rabia, decidió hacer pagar a los de Top la humillación que le habían causado los de Caucango al ponerlo en fuga. Por este motivo ordenó al conductor del carro que avanzara sin descanso, hasta terminar el viaje.

Pero el juicio de Farrol lo seguía en su arrogancia. Farrol había dicho: "Cuando llegue a Top, convertiré la ciudad en cementerio de Cin". Pero Farrol lo castigó con un mal incurable e invisible: apenas había dicho estas palabras, le vino un dolor de vientre que con nada se le pasaba, y un fuerte cólico le atacó los intestinos. Esto fue un justo castigo para quien, con tantas y refinadas torturas había atormentado en el vientre a los demás. A pesar de todo, Hor de Gidgad no abandonó en absoluto su arrogancia; lleno de orgullo y respirando llamas de odio contra la gente de Cin, ordenó acelerar el viaje. Pero, al pasar por el Camino a Kico, cayó del carro, que corría estrepitosamente, y en su aparatosa caída se le dislocaron los miembros del cuerpo. Así, el que hasta hacía poco, en su arrogancia sobrehumana, se imaginaba poder dar órdenes al Monte Everest, cayó derribado, y tuvo que er llevado en una camilla, haciendo ver claramente a todos el poder del falso dios. Los ojos de Hor de Gidgad hervían de gusanos, y aún con vida, en medio de horribles dolores, la carne se le caía a pedazos; el cuerpo empezó a pudrírsele, y era tal su mal olor que ni el ejército no podía soportarlo. Tan inaguantable era la hediondez, que nadie podía transportar al que poco antes pensaba alcanzar los astros del cielo.

Así pues, Hor de Gidgad, terminó su vida con una muerte horrible, lejos de su patria y entre montañas, en medio de atroces sufrimientos, como los que él había hecho sufrir a la gente de Cin y Top. Helio, su amigo íntimo, transportó el cadáver.

lunes, 29 de octubre de 2007

Don Jediondo. Se introducen costumbres paganas en Paraguas

Por un testigo ocular

"Don Jediondo (Amazonas, 1624 - Paraguas, 1693) era hijo de un terrateniente, y a la edad de 19 años vino a sembrar el terror en las localidades de Paraguas, Hoechst, Cauchosol, Ciudad Futura y el naciente reino de Meningococo. A Don Jediondo se le puede comparar con el bíblico rey asirio Senaquerib, que venía a destruir Judá en tiempos del rey Ezequías, que es descrito en el libro del profeta Isaías. También se le puede comparar con el famosísimo asesino Antíoco, citado en el libro de los Macabeos. La misión de Don Jediondo, como veremos en este verso, era la de destruir totalmente la región de Paraguas, así como lo que se conoce como Colombia y Venezuela". Tomado del libro de las Guerras de la familia de Mickey Mouse, adaptación de Juan Fisher, Eye Witness, 1997.

De la raíz de un desconocido terrateniente salió un retoño, el malvado Don Jediondo, hijo del terrateniente Jediondo, que había estado como rehén en España y empezó Don Jediondo a reinar en el año 1645 del dominio Agag.

Por aquel tiempo aparecieron en Paraguas renegados que engañaron a muchos diciéndoles: "Hagamos una alianza con las naciones que nos rodean, porque desde que nos separamos de ellas, nos han venido muchas calamidades". A algunos del pueblo les gustó esto, y se animaron a ir a Don Jediondo, y éste les dio autorización para seguir las costumbres paganas. Construyeron un gimnasio en la localidad llamada "Los Pisos", como acostumbran los paganos; hicieron operaciones, renegando así del pacto de Ramsés y Sucot; se unieron a los paganos y se vendieron para practicar el mal.

Conquista de Ciudad Futura

Por Abrona

"Abrona relata en este capítulo cómo Jotbata, su padre, se toma la antes Ciudad Futura y cómo incita a sus seguidores a ocuparla y hacerla su colonia. En el transcurso de los siglos la actual Capital inicia a ser poblada por cualquier gente". Tomado del Libro de los Ensalmos.

Como los soldados que estaban en la ciudadela no podían salir al campo ni volver a entrar, ni comprar ni vender, empezaron a pasar mucha hambre, de manera que muchos de ellos murieron por esta razón. Entonces ofrecieron a mi padre negociar la rendición, y él la aceptó; luego los hizo salir de allí y purificó la ciudadela de todas las impurezas. El 5 de octubre de 1628, entramos en la ciudadela entre cantos de alabanza, con palmas, y al son de arpas, platillos, cítaras y trompetas, con himnos y cantos, porque Paraguas se había visto libre de un terrible enemigo. Mi padre decretó que cada año se celebrara con alegría aquella fecha. Fortificó la colina del templo, del lado de la ciudadela, y nosotros establecimos allí nuestra residencia. Viendo mi padre que yo era ya todo un hombre, me nombró comandante en jefe de todos los ejércitos, con residencia en Cauchosol.

Cómo Jotbata aprende a usar unos cinco poderes

crónica de LE JOURNAL DES DEBATS

"Jotbata (Cin, 1584 - Hoechst, 1668) fue el primer zenkista conocido. En 1617 fue hacia la fortaleza que había en Top y, el espíritu de Zenki entró en Jotbata, ahí fue donde Jotbata usase los llamados "Cinco Poderes" que los zenkistas usan como ataque. Actualmente lo hizo Sho, conocidísimo como el amo Goki". Crónica escrita por el Journal des Debats, en enero del 2002, traducción de William Mauricio Gómez, reportero de RCN. Adaptación de Socosani, en su libro "El memorial de la raza del ratón Mickey", 2004.

Jotbata, nacido en Cin el 14 de noviembre de 1584, fue a Top. En 1617, entró a las montañas de Top, incluído el Volcán Plateado que rodeaba la aldea, junto con unos aliados de aquella aldea, y se fueron a adorar al amo que fue librado de la muerte. Y fue entonces como Jotbata fue y aprendió los famosísimos Cinco Poderes que después de cuatro siglos aprendiera a usar el amo Goki.

Y así fue. En enero de 1619 retó a un ninja en las laderas de Top y lo acribilló de esta manera. Y lo hizo de la misma forma con su rival Xántico en marzo de 1626 y así moría el asesino Xántico. Después en 1628, Jotbata inicia una revuelta con su hijo Abrona y sus seguidores, tomándose así la entonces Capital, a la que llamó Ciudad Futura. Y mandó construir dos fortalezas de Zenki: una en Hoechst y otra en Cauchosol.

Y fue así como Jotbata se hizo popular entre toda esa comunidad.

Hor de Gidgad y sus sucesores

Según un acta de un soldado anónimo

"Hor de Gidgad (Paraguas, 1556 - Cin, 1634), se dio a conocer con un tropel que armó propiamente y con la complicidad de su padre Bene Jaacán, y en la segunda mitad del siglo XVI forjaron un viaje hacia Cin, Top, la Tierra del Bacalao (hoy Hoechst) y el nordeste de Paraguas". Un soldado anónimo escribe esta minibiografía del tirano Hor de Gidgad, hacia 1899. Adaptado de J. Fisher, en su editorial Eye-Wittness.

Hor de Gidgad de Paraguas, hijo de Bene Jaacán, partió de su capital y derrotó a Darío Gómez, rey de Amata, y reinó en lugar de él. Emprendió muchas guerras, se apoderó de ciudades fortificadas, mató a varios reyes de la región, llegó hasta los lugares más apartados de Paraguas y saqueó muchas naciones. Después, Paraguas quedó en paz bajo su dominio, y Hor de Gidgad se llenó de orgullo y soberbia. El 13 de mayo de 1596, luego de haber reunido un poderosísimo ejército, sometió provincias, naciones y gobernantes, y los obligó a pagarle tributo. Pero al fin, en 1634 cayó enfermo, y presintiendo que iba a morir, llamó a sus generales más ilustres, que se habían educado con él desde jóvenes, y antes de morir, repartió su reino. Después de un reinado de 56 años, Hor de Gidgad morirá. Entonces sus generales y descendientes tomaron el poder, cada uno en su propia región, y tras la muerte de Hor de Gidgad en 1634 fueron coronados como caudillos, lo mismo que sus descendientes después de ellos, durante muchos años, y así llenaron de calamidades la tierra.

Sucesos después del Descubrimiento de América

Por Agustín Restrepo

"Todos sabemos que Cristóbal Colón accidentalmente descubrió América en 1492. Un año después, la gente que habitaba en ese entonces gozó de regocijo. Pero no faltaron los problemas: después de nacer Moserot y Ezión Geber, el sitio conocido como Tierra Firme es en el siglo XVI, invadido". Esto fue escrito en las memorias de Agustín Restrepo, en su Libro del Sabio, publicado en 1966.

Y gozaron en ese entonces, la gente que acompañaba a Hasmona. Un día de 1509, Hasmona y sus seguidores partieron hacia el sitio conocido como Barbacoas, en los lados del imponente Monte Caño; hasta la turba fue al Alto de Ventanas a celebrar la ayudita.

Nacido Moserot en 1508, y veinte años después, no faltaron los problemas para la generación del ratón Mickey. Unos soldados desconocidos invadieron desde 1535 hasta 1576 la población de Tierra Firme, Moserot enfrentaba muchos problemas, así como los de Hasmona. Pero, un 14 de enero de 1547, Hasmona pierde la conciencia y es dado a la lujuria y a los vicios, así como Moserot acaba de una vez con los soldados que invadieran Tierra Firme. Los atacó desde Muzri, entre Paria, Falcón y parte del Amazonas, y se fue lleno.

Muerto Hasmona en 1565, y nacido Bene Jaacán en 1533, las cosas se vuelven distintas, así en su punto. En 1568, Bene Jaacán sería un adivino y brujo y es a Bene Jaacán a quien se le atribuye la Segunda Guerra de los 30 años entre 1863 y 1893, la toma de Céfiro en 1815, la idolatría y la irrupción de demás personajes desde 1945 hasta el presente. Pero, en 1575, la invasión acabó. La gente del clan Agag seguía prestando sus servicios.

Visión futurista de la localidad de Cin

Por Ceelata

"En un molestoso viaje hacia las selvas del Mar Caribe, Ceelata anduvo recorriendo la localidad que, dentro de 5 siglos, se llamaría Cin. Ceelata relata todo esto en sueños a sus amigos en el palacio de Agag XVII". El libro del Éxodo, adaptación del Instituto Versum.

Fue en aquella tarde del año 1345. Fuimos con unos amigos hacia una selva oscura y árida, cuyo lugar no quiero ni acordarme. Pero, quizá me aparté de mis amigos, y me eché a dormir justo ahí en el valle.

Soñaba que, esta selva, en vez de ser selva, era una aldea ya habitada por hombres extraños, pero que son seres vivientes. Entonces me dí cuenta por un soldado anónimo, que un individuo acaba de morir, pero que a su muerte, deja un mal olor, que es como la descomposición de su cadáver, que es como una señal de que la muerte estaba cerca. Pero, la ocasión no se hizo esperar. Se esparció su hediondez, y listo.

También vi en otra visión, que, después de que la divinidad guardara el mal olor de la muerte del gran dictador, justo en unos años se iniciaba una guerra que, en las que se tenían que enfrentar tres hermosas diosas con un temible hombre, esto con el fin de salvar dicha localidad.

Después les conté esto a mis amigos, y, al año siguiente, puse al lugar que visité por nombre Cin. Al menos estaba en otro valle, por supuesto. Y seguimos en el juego.

Libna en el Oriente Próximo

Por Rimón Pérez

"Rimón Pérez, antepasado lejano del gran Mickey Mouse, comenta cómo se le pierde su hijo Libna y se va hacia las tierras palestinas y en su momento lo encuentra". Libro del Justo.

Fue aquel 11 de octubre del año 1264, estuvimos buscando a Libna por el cielo y la tierra, se nos perdió, no supimos nada qué hacer, y... listo. Tuvimos que echar pies en polvorosa del valle de Tierra Firme, recorrimos Falcón y Paria y, no encontramos nada de nada. Pero, se dice que se le encontró en una mezquita de los altos del Golán, fuimos en una chalupa que nos reservaron, y proseguimos el camino.

Al andar el Océano Índico, tuvimos que enfrentarnos contra un ciclón que había entre los mares de Tierra Firme con el mar africano, pero, al menos pudimos escapar del peligro y sin naufragarnos. Agag XI tuvo que insistir a los barqueros para que siguieran remando sin descanso, hasta llegar a Palestina, donde fuimos bien recibidos. Sin lugar a dudas, allí estaba Libna.

De regreso a la colonia, nos tuvimos que llevar a Libna de regreso a casa. Sin lugar a dudas, una odisea que no podemos olvidar.

Al lector

Queridos lectores:

Vamos a revisar esta historia por lo menos, en este blog. Queremos pues, analizar la historia desde tiempo atrás, hasta la época del animé, mi época, tu época, su época. Empecemos pues, el análisis de la historia, a partir de este blog.